"HISTORIAS QUE INSPIRAN...": COYA, EL PODER DE LA MUJER EN EL IMPERIO INCA
Coya en quechua es la denominación para la reina o hija del rey. Era uno de los títulos más importantes que algunas mujeres recibían y que simbolizaba el poder que estas poseían en el gobierno liderado por los hombres.
La Coya era la esposa del Inca. Al estar vinculada con la realeza, otorgó notoriedad a la presencia de la mujer andina. Ella poseía un gran poder en el Tahuantinsuyo, su rol de líder nunca fue opacado o cuestionado por su pueblo, se encargaba de liderar a las mujeres, asimismo, dirigía los cultos religiosos, que sugieren la existencia de una estructura de autoridad dual, donde la coya representaba a todas las mujeres.
Algunos estudiosos consideran a Huaco, hermana de Mama Ocllo, como la primera Coya, quien tomó la responsabilidad de educar a las mujeres, enseñándoles técnicas de tejido, cocina y otros recursos que le permitan mantener en buenas condiciones a los miembros de la realeza. Se le consideró también una guerrera feroz, y la encarnación de las mujeres guerreras gobernantes del antiguo Perú, que conducían ejércitos a la batalla.
La dinastía cusqueña estuvo conformada por 12 Incas y 12 Coyas, en la que se encuentra Mama Ocllo, Ana María Coya, hija de Beatriz Clara Coya; esta última, junto con Francisca Maldonado, Juana Maldonado y Melchora Sotomayor Coya eran hijas de María Cusi Huarcay Coya, hija a su vez de Coya Cuxi Huarcay, y esta última hija de Mama Huarcay. Estas mujeres serían descendientes de una coya llamada Huarque o Huarcay, lo que confirma que la autoridad en los Andes prehispánicos no puede concebirse sin la presencia femenina. Es importante recordar que para el mundo andino prehispánico los hombres descendían de una línea masculina y las mujeres de una línea femenina. Así la coya, como hija de la Luna y representante de todas las mujeres, tuvo la misma relación con su diosa-madre la Killa (luna), que la que tuvo el Inca con su padre el Sol (Inti).
En la cultura Inca, los poderes femeninos tradicionalmente se vinculan al sostenimiento de la reproducción y la fertilidad. En este sentido, la parte de autoridad que correspondía a la feminidad, era la que garantizaba la permanencia de la armonía, por ello las mujeres de la nobleza inca son personajes clave para entender el período del virreinato del Perú. El poder de la Coya, que se manifiesta en diversos ámbitos donde las mujeres con un rango o dignidad regían, llegaron a ejercer influencia en el Tahuantinsuyo. Porque tuvieron derecho sobre las tierras destinadas a su uso personal, siendo muy probable que la producción de los campos fuera utilizada para mantener culto. Al mismo tiempo, hubo algunas Coyas que gobernaron el Cuzco en ausencia del Inca y arbitraron en las decisiones del consejo real. Por mucho tiempo, para ostentar la dignidad de Coya en el Tahuantinsuyo, había que ser la esposa del inca; cosa que cambió en la segunda mitad del siglo XVI, con la desaparición de los incas Sayri Túpac y Túpac Amaru.
En ILLARI SOUVENIRS queremos enaltecer y difundir el respeto a la figura de la mujer, honrar a ese ser que con amor y paciencia ha forjado sociedades que poseen el don del arte textil a lo largo de la historia y que, inspiradas en ellas, hemos creado la hermosa Casaca Coya la cual, con sus detalles en manta representa el poder y elegancia de la mujer. Hecha de material resistente al agua, muy versátil para que siempre puedas llevarla y en su interior posee un forro termino tan cálido como el amor de las mujeres andinas y un bolsillo hecho de manta en forma de “Chacana” que significa escalera y su forma es la de una cruz cuadrada y escalonada con doce puntas que, representan en la astronomía andina, la unión entre lo bajo y lo alto, la tierra y el sol, el ser humano y aquellas figuras que eran intermediaras entre la tierra y lo superior, como lo era la Coya.
Atte.
Team Illari Souvenirs Arequipa